Es bien sabido que una copa de buen vino puede ser uno de los grandes placeres de la vida. Cuando consumimos vino tinto, nuestro cuerpo reaccionará poniendo en acción toda una maquinaria de receptores sensoriales. Nuestro sentido del gusto y el olfato en particular pueden detectar muchos sabores diferentes, dando una sensación rica e intensa. Pero, lo primero que atrae de una buena copa de vino tinto es su intenso color.
Pero este intenso y llamativo color deja de ser algo placentero en el momento que el vino se derrama en nuestra prenda favorita, y ni pensar en el pánico que entra si se trata de ropa blanca.
Pero no te preocupes, aquí te damos algunos tips para quitar las manchas de vino en un dos por tres.
Sal de mesa
Lo más crucial con las manchas de vino es actuar rápido, pues será más fácil eliminarla cuando es reciente y no cuando se ha secado.
La sal de mesa puede ayudar a absorber la humedad del vino para evitar que se extienda por los tejidos. Pero es importante que no la dejes por demasiado tiempo o se podría fijar la mancha de vino.
Vino blanco
Aunque suene un poco extraño, un poco de vino blanco puede ayudarte a eliminar una mancha de vino tinto pues los taninos del vino blanco ayudan a neutralizar las manchas de los taninos del vino tinto.
Para hacerlo debes humedecer un trapo limpio en vino blanco y dar pequeños golpecitos sobre la zona manchada. Evita restregar la mancha para que esta no se extienda. Luego deja actuar al vino blanco por un par de minutos y para terminar lava la prenda con agua y jabón.
Bicarbonato de sodio
Este compuesto es conocido por sus propiedades de limpieza y es ideal para las manchas de vino tinto.
Si lo combinas con el vino blanco tendrás un arma poderosa contra las manchas de vino tinto.
Lo que tienes que hacer es que una vez empapaste la zona con vino blanco y después de dejarlo actuar un tiempo, aplicas una pasta de bicarbonato de sodio y agua sobre la mancha. Deja actuar por unas horas y luego lava con normalidad.